Los mercados financieros están viviendo una crisis global y sin embargo hay muchas dificultades para detectar cuales serán sus consecuencias. Tomemos varias notas del economist. De la reunión de Jackson Hole existe consenso para echarle la culpa a Greenspan y las tasas al 1%. Es cierto que en retrospectiva el esfuerzo para evitar una posible deflación y una más improbable recesión fue excesivo y que Greenspan estaba encantado con su discurso sobre tasas de interés reales de equilibrio muy bajas, sea lo que signifique para cualquiera. Esto llevó a que al elevar las tasas se diera su conundrum lo que hablaba bien de su percepción.
El fenómeno sistémico de la crisis es la liquidity crunch y las dificultades de la Fed para lidiar con la misma pues los bancos no serían los únicos capaces de operar a través del multiplicador monetario. Pero esto es ilusorio porque no hay private equity, hedge funds, SPV, y otros triple letras que no dependan de los bancos para la liquidez.
Segundo fenómeno de impacto inmediato es el crecimiento de los default en el sub-prime y su consecuencia antes de las elecciones. En cualquier momento vienen a estudiar la Ley 25798 de creación del Fideicomiso para la Refinanciación de Hipotecas.
El tercer fenómeno y el más preocupante es una posible recesión a partir del efecto riqueza por la caída del valor de las propiedades, la menor actividad de la construcción y una mayor incertidumbre sobre la confianza del consumidor.
Pero mientras hay consenso de que la Fed no debería haber permitido la burbuja también hay consenso de que la Fed tampoco debe permitir que la burbuja se pinche así nomás, por lo que el mercado espera que las tasas de corto desciendan mientras que la Fed se ve reacia a hacerlo, si bien cada vez menos.
Para los mercados emergentes la gran pregunta es si los niveles de spread y riesgo actuales son cercanos a un nuevo equilibrio pasado la sobrereacción o volveremos a ver etapas de easy Money.
Lo que es seguro es que ésta recesión importada le viene como anillo al dedo al gobierno para que la actividad modere su crecimiento y descienda la presión inflacionaria sin tener que tomar medidas importantes si bien es cierto que un componente cada vez más importante de la inflación se debe al boom de los commodities. Habrá que esperar hasta el 12 para ver qué pasa.
Ejemplo es el escalón más arriba que dejo las tasas el BCRA cuando pudo salir a ofrecer mayor liquidez. Qué mejor escenario para el BCRA que una mayor demanda de pesos suministrada por la cancelación de sus Lebac, una disminución de la presión sobre el dólar y la constatación que en un escenario de menor exuberancia irracional es posible trabajar con una banda de precio del dólar y no solamente con la tendencia a apreciarse.
lunes, septiembre 10
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